VALLADOLID 19/10/2013 – Los periodistas de Castilla y León han constituido hoy su Colegio Profesional, el quinto de los que funcionan en España sometido al Derecho Público, del que será decana Mar González Mena, cabeza de la única lista presentada a la asamblea, que se ha celebrado en los salones de la Cámara de Comercio de Valladolid, donde también han quedado aprobados los estatutos.
Con el objetivo de tener una función representativa y deontológica, sus promotores entienden que este organismo de ámbito autonómico contribuirá a una mejor defensa de las condiciones en las que trabajan los periodistas, garantizando la independencia y libertad informativa en beneficio de la sociedad castellano y leonesa, además de salvaguardar el derecho a la libertad de información y de expresión.
El Colegio Profesional de Periodistas de Castilla y León, como ha explicado la decana en un día histórico para el periodismo de esta Comunidad, ha nacido en el seno de la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE), como el de Murcia y el de Andalucía. Los tres se han venido a sumar a los colegios de Cataluña y Galicia. Asimismo está a punto de constituirse el del País Vasco, cuentan con trámites muy avanzados La Rioja, Castilla-La Mancha y Navarra y están iniciando el proceso Extremadura y Cantabria.
González Mena se ha referido a la necesidad de convivencia con las asociaciones de periodistas de las que surge, a quienes ha ofrecido mano tendida y colaboración, para algo tan importante como es la unidad de acción, en unos momentos muy difíciles para el periodismo. La crisis económica se ha llevado por delante a unos 200 medios en España, desde 2008, dejando en la calle a unos 10.000 periodistas, en torno al 30% de los profesionales en ejercicio, mismo porcentaje que se puede aplicar en Castilla y León, con más de dos centenares de periodistas que han tenido que acudir a las oficinas de empleo.
En esta Comunidad, según la decana, se ha vivido el cierre de destacadas cabeceras, como el Adelanto de Salamanca o la Crónica de León, entre otros, mientras ha abogado por no tener que lamentar la desaparición de más medios, aparte de subrayar su preocupación por la reducción progresiva de las redacciones locales, la situación de los corresponsales y “freelance” y el empeoramiento de las condiciones de trabajo.
Por eso, ha añadido González Mena, “el Colegio de Periodistas de Castilla y León nace con el objetivo de luchar por mejorar la situación del periodismo y de sus profesionales en la comunidad, apostar por la formación y por promover acciones tendentes a la creación o mejora del empleo, así como velar por un periodismo de calidad, libre y al servicio de la sociedad”.
Uno de los objetivos de la nueva junta de gobierno, en coordinación con otros colegios autonómicos, es trabajar por conseguir que el anteproyecto de Lay de Servicios Profesionales contemple la colegiación obligatoria para el ejercicio de algunas actividades del periodismo.
Para Gabriel García Márquez, “el periodismo es el mejor oficio del mundo”, según la decana, quien ha apuntado que, a pesar de la actual situación, “nos encontramos ante una profesión vocacional e imprescindible para nuestra sociedad y tenemos que empezar por valorarla nosotros mismos y hacérselo ver también a los futuros periodistas”. “En este, sentido, desde el Colegio de Castilla y León esperamos poder trabajar codo con codo con las facultades de comunicación”, ha matizado.
Junto con González Mena, en la junta de gobierno figuran los vicedecanos Ana María Garrido Redondo, Fernando Aller González y Roberto Zamarbide, mientras que como secretario general se encuentra Aurelio Martín y como vicesecretaria Susana Arizaga. Juan Francisco Rojo será el tesorero y actuarán como vocales: Estela Carretero García, Victoria Rodríguez Prieto, Victoria Domínguez Barroso, Beatriz Sanz Olandía, Pedro Lechuga Mayo e Ignacio Coll Tellechea.
La junta de gobierno, que ha mantenido su primera reunión tras ser elegida, ha acordado fijar la sede del Colegio en Burgos, provincia donde ejerce la decana, como se prevé en los estatutos, así como nombrar delegados en cada una de las provincias, además de fijar las líneas de trabajo y de régimen interno. Los estatutos recogen que el Colegio Profesional de Periodistas goza de dos privilegios por su condición de institución de Derecho Público: por un lado ostenta la representatividad de una profesión, lo que le otorga capacidad para intervenir en el proceso de elaboración de las leyes que le afecten, designando representantes en Consejos Audiovisuales y otras instancias públicas; y por otro lado fijan un código deontológico profesional que redunda en beneficio de la sociedad y en el prestigio de la profesión.